El gazpacho es una ensalada picada o batida con raíces históricas muy antiguas a base de pan desmigado, aceite de oliva, vinagre, ajo, agua y hortalizas y que suele servirse frío, como bebida o alimento para los meses de verano.

Hay muchos tipos de gazpacho según regiones y gustos, pero en nuestro caso somos aficionados al llamado «gazpacho andaluz» o «gazpacho extremeño», que es muy similar en gran parte de Extremadura, Andalucía occidental y oeste de Castilla La Mancha y donde el ingrediente destacado es el TOMATE (producto de temporada) y con el que obtendremos una especie de sopa fría con colores que van desde el naranja pálido hasta el rojo, según el tipo y la madurez de los tomates, que aportan licopeno, que es un colorante natural y con saludables propiedades antioxidantes.
El gazpacho siempre fue una comida nutritiva de reaprovechamiento de gente humilde del campo y no fue hasta el siglo XIX en que empezó a popularizarse entre clases altas la receta del gazpacho con tomate y que acabaría siendo internacionalmente conocido a mediados del siglo XX con el aumento del turismo extranjero.
En nuestro caso un aceite de oliva virgen extra de calidad es un ingrediente indispensable para un buen gazpacho rojo y seguro que conseguirás mejorar y destacar los sabores de una forma espectacular, además de darle su toque más saludable. Es una receta sencilla y rápida con un sabroso resultado para repetir muchos días.
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:
- 6 tomates maduros grandes (aproximadamente 800 gramos).
- 50 gramos de pan duro (del día anterior y sin corteza).
- 3 cucharadas de aceite de oliva vírgen extra.
- 1 cucharada de vinagre de vino blanco (al gusto).
- 250 ml de agua fría (se ajustará según la textura que se desee).
- Sal (al gusto).
- 1 diente de ajo (al gusto).
- 1 pepino (mediano).

ELABORACIÓN:
Para obtener el mejor resultado es importante elegir buenos ingredientes y un aceite de oliva virgen extra de máxima calidad, de la variedad que más te guste y con el punto de intensidad que prefieras para el resultado final. En nuestro caso utilizamos un AOVE premium SOL DE BARROS COUPAGE «5 OROS» ecológico de cosecha temprana y de intensidad media que le dará un toque exclusivo.
- Preparar los ingredientes: Lava bien los tomates y córtalos en trozos grandes; pela el pepino y córtalo en rodajas; pela el ajo y retira el germen (la parte central), si lo deseas, para suavizar el sabor; remoja el pan en un poco de agua para ablandarlo.
- Triturar: En el vaso de una batidora, o licuadora, pon los tomates, el pepino, el ajo, el pan escurrido, el vinagre y una pizca de sal. Tritura todo durante 1-2 minutos hasta que quede una mezcla lo más fina posible.
- Añadir el aceite y el agua: Con la batidora en marcha, añade poco a poco el aceite de oliva para que emulsione y el gazpacho quede más cremoso; luego añade el agua fría hasta conseguir la textura deseada (puedes poner más o menos según si te gusta más líquido o espeso).
- Colar (opcional): Si quieres un gazpacho más fino puedes pasarlo por un colador o chino; si te gusta espeso no es necesario este paso.
- Enfriar: Guarda el gazpacho en la nevera al menos 2 horas antes de servirlo; cuanto más frío, mejor.
- Servir: Sirve en cuencos o vasos. Puedes acompañarlo con trocitos de pepino o pan tostado si lo deseas (aunque no es imprescindible), también se puede combinar con melón, uvas, higos u otras frutas de verano.
