Las torrijas son uno de los dulces tradicionales más extendidos y que se conoce desde la antigüedad con diferentes nombres y preparaciones. En la Península Ibérica ya se las conocía con el nombre de torrejas o torrijas desde la Edad Media y fue rápidamente asimilada en toda Iberoamérica. Es otro de los dulces típicos para tiempo de Cuaresma y Semana Santa.
Elegir el tipo de aceite para freírlas dependerá del gusto personal y del sabor que se quiera aportar. En la mayoría de las recetas recomiendan aceite de girasol, sin embargo éste se degrada fácilmente con las altas temperaturas y su reutilización lo convierte en nocivo para la salud. Por eso nosotros recomendamos aceite de oliva vírgen extra. El AOVE aporta un sabor más intenso y diferenciado, también es más saludable que otros aceites por su alto contenido en grasas monoinsaturadas beneficiosas para el corazón y soporta mucho mejor las altas temperaturas de la fritura sin alterar sus propiedades; además tenemos la ventaja de que se puede reutilizar varias veces sin que sea perjudicial para la salud.

Por eso os traemos una receta bastante sencilla de unas torrijas con leche donde usaremos como ingrediente de calidad nuestro aceite de oliva virgen extra ecológico (AOVE) Coupage «5 Oros» porque en la fritura nos aportará un resultado espectacular en su sabor y textura; AOVE que podéis adquirir en nuestra tienda de internet de SOL DE BARROS.
Se necesitan los siguientes INGREDIENTES:
- 1 barra de pan. (Si es del día anterior mejor)
- 1 litro de leche entera
- 150 gramos de azúcar
- 1 rama de canela
- Piel de 1 limón (sin la parte blanca)
- 2 ó 3 huevos
- Aceite de oliva vírgen extra (para freír)
- Canela en polvo y azúcar (opcional para espolvorear)
REALIZACIÓN:
La elaboración comienza calentando la leche con la rama de canela, la piel de limón y el azúcar, cuando empiece a hervir retira del fuego y deja infusionar 10-15 minutos, luego se cuela; corta el pan en rebanadas de unos 2-3 cm. de grosor, empapa el pan en la leche y coloca las rebanadas en una fuente honda. Deja que se empapen bien pero sin que lleguen a deshacerse; reboza cada rebanada en los huevos batidos con cuidado y seguidamente fríe las torrijas en aceite abundante y bien caliente hasta que estén doradas por ambos lados, cuando se retiran se ponen a escurrir sobre papel absorbente.
El rebozado final será al gusto de cada uno, puede ser espolvoreando con azúcar y un poco de canela en polvo (como hemos hecho nosotros), o con miel o un almíbar ligero.
¡ ESTABAN EXQUISITAS! 😉
